Un auténtico viaje en el tiempo te espera al visitar Chester, la bucólica capital del condado de Cheshire, en el noroeste del país. Todo en la ciudad de Chester te teletransporta al pasado, comenzando por su increíble patrimonio arquitectónico del tiempo de los romanos. Hace dos mil años, cuando tenía el nombre de Deva, era el campamento de la Legión XX, que creció tanto hasta convertirse en uno de los asentamientos romanos más grandes de Gran Bretaña, y cuya historia puedes descubrir en el Dewa Roman Experience Center.
De aquella época nos han quedado imponentes monumentos, como las murallas romanas de Chester, que con más de tres kilómetros de longitud son las más largas y mejor conservadas de Inglaterra, y por las que además puedes pasear para disfrutar de las mejores vistas que ver en Chester.
No puedes dejar de visitar el Anfiteatro Romano de Chester, también el más grande del país, y que podía albergar hasta 8.000 espectadores, y el hipódromo, The Rodee, que está en el lugar que ocupaba el puerto romano. Pero visitar Chester es imprescindible, sobre todo, por su encantador sabor medieval.
Sus calles medievales, con las famosas casas entramadas de Chester como testigos privilegiados, han conservado ese aroma de otro tiempo. No dejes de visitar The Rows, un conjunto de galerías con tiendas de todo tipo que, conectadas entre sí, ocupan varias viviendas tradicionales.
Las encontrarás en The Cross, el cruce de las calles Watergate, Bridge, Easgate y Northgate, y que es, sin duda, uno de los lugares que ver en Chester más bonitos e instagrameables. ¡Y si te has quedado con ganas de más compras en Chester, puedes visitar Cheshire Oaks, un imenso centro comercial que, a unos 16 kilómetros del centro de Chester, es el outlet de diseño más grande de Gran Bretaña.
La Catedral de Chester, de estilo gótico, es una de las iglesias más bonitas de Gran Bretaña, ¡y además podrás tomar algo en su cafetería, The Refectory Cafe, en el precioso salón del siglo XIII donde comían los monjes, decorado con tapices, cuadros y vidrieras medievales.
El Castillo de Chester, del siglo XI, es uno de los castillos medievales mejor conservados de Inglaterra. ¡Y en tu visita a Chester no dejes de hacerte un selfie con el Eastgate Clock, uno de los relojes más fotografiados del mundo. Viajar a Chester es muy sencillo, y es fácilmente accesible desde varias ciudades de Inglaterra.
Si vas a viajar a Liverpool, una vez allí, hacer una excursión a Chester es una excelente idea, pues está muy cerca. La mejor manera de viajar a Chester desde Liverpool es en tren, que sale de la estación Liverpool Central y emplea unos cuarenta minutos en cubrir el trayecto entre ambas ciudades.
Los aeropuertos más cercanos a Chester son el Manchester International Airport y el Liverpool John Lennon Airport. Los dos están a unos cuarenta minutos en coche del centro de Chester, a donde puedes llegar en autobús desde el aeropuerto internacional de Manchester.
Para viajar a Chester desde Londres, la mejor opción es el tren. De media, cada día hay 16 trenes entre Chester y la estación de Euton. El trayecto dura algo más de dos horas.